Lucas 4:18.
El
Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas
nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los
cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos;
I.-
Durante el ministerio de Jesucristo una
de las cosas más notoria de todas sus obras en la tierra fue la diversidad de
su ministerio. En este versículo podemos notar que de los cinco elementos para
lo cual Él fue ungido, uno va ligado directamente a la salvación del alma y los
otros cuatro tienen algo en común esto es la sanidad interior del alma y la liberación.
1.
Vino
a dar buenas nuevas a los pobres.
¿Cual es la buena noticia que se le puede dar
a un pobre? Que va recibir pan, que va a recibir riqueza que se va a liberar de
todas sus deudas, pero en este contexto Jesús esta hablando de una pobreza
espiritual que solo se sana con la salvación del alma y esta se obtiene
reconociéndole a El como salvador personal.
Dice
la biblia que Él se hizo pobre, al morir en la cruz para que todo el que le
reciba goce de riqueza y que se hizo maldición para que seamos bendecidos,
porque escrito esta que maldito es el
que muere en una cruz.
2. Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón,
a pregonar libertad a los cautivos, vista a los ciegos; a poner en libertad a
los oprimidos.
Estos cuatro propósitos para los cuales fue
enviado y ungido nuestro Señor tienen que ver directamente con el ministerio de
la liberación. Un ministerio que los creyentes hoy en día han dejado en el
olvido y que es de vital importancia para la vida de las Iglesias ya que dentro
de ellas hay muchas personas quebrantadas de corazón, con grandes heridas del
pasado que no le permiten avanzar en el Señor.
Pero también hay muchas personas cautivas por
costumbres y ataduras que están en sus cuerpos y que no les permiten
consagrarse y vivir una vida en santidad. Cautividades que les enceguecen y los
convierten en incrédulos.
¿Usted
sabia que hay muchos cristianos que no son creyentes?
Así es, se puede ser un cristiano y no ser
creyente y usted dirá ¿como así? Porque hay cristianos que no le ha
resplandecido la luz del evangelio.
La biblia dice: “que el príncipe de este
siglo ha vendado (Otras versiones dicen ha cegado) el entendimiento de los
incrédulos para que no le resplandezca la luz del evangelio” que es Cristo,
pero también dice que El vino a dar vista a los ciegos y a poner en libertad a
los oprimidos.
¡Usted pensara! y quizás no este de acuerdo
con lo que estoy planteando, ¡quizás dirá!, pero un cristiano no puede estar
cautivo ni oprimido y tal ves ¡dirá! esto solo aplica para los inconfesos e
impíos; permítame decirle que no es así, Jesús vino a los suyos y los suyos no
le recibieron, por lo que la liberación es para los que le recibieron, para los
que le fue dada la potestad de ser llamados sus hijos, esto es para los
creyentes. La liberación es el pan de los hijitos, es un ministerio para bendecir
a su Iglesia.
La liberación espiritual es el primer
ministerio que Jesús le muestra y le comisiona a la Iglesia cuando El mismo
establece que “esta señales seguirán a los que creen que en mi nombre echaran
fuera demonios”, esta hablando del ministerio de liberación y este mandato esta
precedido por la ordenanza de Id a predicar el evangelio, lo que implica que
luego de la salvación viene la liberación y luego la sanidad.
La salvación es para el alma por eso la
biblia dice: “que el alma que pecare esa morirá”; pero el ser humano no esta
compuesto solamente por el alma, sino también por un cuerpo y un espíritu. Es
en el cuerpo donde se esconden y se encuban todas las ataduras y las ligaduras demoníacas.
El apóstol Pablo decía, hablando del pecado
de la fornicación, que el que fornica contra su propio cuerpo fornica,
queriendo decir que las consecuencias del pecado afectan de manera directa a
nuestro cuerpo, razón por la cual necesitamos la liberación de nuestros cuerpos.
Cuando una persona es violada sexualmente, los espíritus y demonios que habitan
en el violador son transferidos a través del semen a la victima.
Por tal razón toda persona que es victima de
una violación necesita ser ministrado en liberación y sanidad interior, y esto
es un deber de la Iglesia
¿Qué
sucede si un creyente muere sin ser liberado? ¿Se pierde su alma?
Definitivamente no, Como dijo el salmista
David “Mi alma esta escondida en Dios”. El
alma esta escondida por medio de la
salvación que obtuvimos a través de haber confesado a Jesucristo como nuestro
salvador personal, lo que si se pierde es el gozo de la salvación mientras
estamos en vida.
Muchas personas no pueden levantar sus manos
para adorar a Dios, ni tienen el animo o el deseo de decir un ¡gloria a Dios!
porque sus ataduras no se lo permiten, no pueden alabar, pierden el gozo y por
ende la fortaleza, porque dice la palabra “que el gozo del Señor es nuestra
fuerza”.
II.- Jesús vino a
destruir todas las obras del diablo cuyo plan es llevar a la humanidad al
pecado y nos invita a todos los que formamos parte de su Iglesia a hacer lo
mismo. 1 Juan 3:8 dice:
“El que practica el pecado es del diablo;
porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios,
para deshacer las obras del diablo”.
Durante su ministerio Jesucristo realizo
varias liberaciones y si él lo hizo y nosotros debemos de ser imitadores de
suyo, entonces ¿por qué en las iglesias se le tiene tanto miedo al ministerio
de liberación? Veamos a la luz de la palabra dos de las veces en que el mesías
ministro liberación:
1. La suegra de pedro (Lucas 4:38-39).
“Entonces Jesús se levantó y salió de la
sinagoga, y entró en casa de Simón. La suegra de Simón tenía una gran fiebre; y
le rogaron por ella. E inclinándose
hacia ella, reprendió a la fiebre; y la fiebre la dejó, y levantándose ella al
instante, les servía. “
Notemos que los espíritus de maldad pueden
enfermar a un creyente. Esta mujer que era también una seguidora y sierva del mesías
estaba siendo oprimida por un demonio de fiebre que no le permitía servirle. Jesús
lo reprendió y enseguida fue liberada de este espíritu y concluye diciendo que
ella levantándose al instante le servía. Muchas personas no le pueden servir al
Señor de todo corazón porque sus cuerpos están cautivos y muchas veces también
su espíritu.
Nosotros
tenemos la autoridad como Iglesia para hacer lo mismo y aun cosas mas grandes
que la que el hizo. Jesús así lo declaro. Juan 14:12-14.
“De cierto,
de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo
hago, él las hará también; y aun mayores hará,
porque yo voy al Padre. Y todo lo que
pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en
el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre,
yo lo haré”
2. La mujer con espíritu de enfermedad (Lucas 13:10-12)
Enseñaba Jesús en una sinagoga en el día de
reposo; y había allí una mujer que desde
hacía dieciocho años tenía espíritu de enfermedad, y andaba encorvada, y en
ninguna manera se podía enderezar. Cuando Jesús la vio, la llamó y le dijo: Mujer, eres libre de tu enfermedad. Y puso las
manos sobre ella; y ella se enderezó luego, y glorificaba a Dios.
Notemos en esta liberación que Jesús estaba
enseñando en una sinagoga y había dentro de aquella Iglesia una creyente que
tenia dieciocho años con un espíritu de enfermedad, dice que andaba torcida. Así mismo hoy en día hay muchas personas en
las iglesias que no se pueden enderezar, que están encorvadas, solo pueden
mirar hacia abajo donde están las cosas terrenales, no pueden alabar ni
glorificar al Señor, dice: “pero Jesús
la vio”.
Él lo ve todo, lo conoce todo, él conoce la
necesidad de su pueblo y esta siempre dispuesto a darnos la libertad. El dio la
palabra de liberación y puso su mano sobre ella y fue libre.
Cuando una persona es liberada se le endereza
la vida, le vuelve el gozo y luego puede glorificar y alabar a Dios.
Necesitamos que este ministerio sea restaurado en las Iglesias, para así tener
mas personas sana y capaz de multiplicarse, ya que un árbol enfermo nunca podrá
dar buenos frutos.
III.- Los primeros
apóstoles también ejecutaron el ministerio de liberación.
Hechos 8: 6-8
“Y la gente, unánime, escuchaba
atentamente las cosas que decía Felipe, oyendo y viendo las señales que hacía.
Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, salían éstos dando grandes
voces; y muchos paralíticos y cojos eran sanados; así que había gran gozo en
aquella ciudad”.
Hechos 16:16-18.
“Aconteció que mientras íbamos a la oración,
nos salió al encuentro una muchacha que tenía espíritu de adivinación, la cual
daba gran ganancia a sus amos, adivinando. Esta, siguiendo a Pablo y a
nosotros, daba voces, diciendo: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo,
quienes os anuncian el camino de salvación. Y esto lo hacía por muchos días;
mas desagradando a Pablo, éste se volvió y dijo al espíritu: Te mando en el
nombre de Jesucristo, que salgas de ella. Y salió en aquella misma hora”.
Tenemos la unción, el mandato y la autoridad
para ejercer este ministerio tan importante para la Iglesia usémosla.
IV.- ¿Como y cuando
entran los demonios a las personas?
1. En el vientre, antes del nacimiento.
Por medio de la
fornicación, el adulterio y de la violación.
· Por una
palabra de rechazo emitida durante el embarazo, la criatura puede nacer con este
espíritu y ser controlada durante toda su vida. Personas rechazadas se unen por
lo general con otras rechazadas y crean hijos rechazados. Esto se convierte en
una cadena que tiene que ser rota a través de la liberación.
· Por palabras
de maldición emitidas por la madre o el padre de una criatura. Ej. “Yo desearía
que nunca hubieras nacido” y otras palabras que provienen de embarazos no
deseados o accidentales.
2.
El
pecado no confesado es también una puerta abierta a la demonización.
· Hay un
demonio en conexión con toda clase de pecado. Cada vez que se comete un pecado
se produce un demonio. El pecado es una puerta que le da lugar a que el diablo
cree una atadura espiritual que cautiva nuestros cuerpos.
Efesios 4:26-27 dice:
“Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni
deis lugar al diablo”.
3.
A
través de los dichos de nuestra boca.
Las palabras también pueden
cautivarnos, dependiendo de cual sea su procedencia desde nuestro
corazón. De un corazón con resentimientos brotaran palabras que nos amarraran
más al espíritu de odio.
Proverbios 6:2.
“Te has
enlazado con las palabras de tu boca, Y has quedado preso en los dichos de tus
labios”.
4.
A
través de la falta de perdón.
Cuando no
perdonamos a quienes nos ofenden Dios tampoco nos perdona a nosotros, he decir
la falta de perdón provoca el enojo de Dios sobre su creación. Cuando la biblia
habla de los verdugos se refiere específicamente a los demonios que atormentan
el cuerpo.
Mateo 18:34-35.
“Entonces su señor, enojado, le entregó a los verdugos, hasta que
pagase todo lo que le debía. Así también
mi Padre celestial hará con vosotros si no perdonáis de todo corazón cada uno a
su hermano sus ofensas”.
5. Por el
pecado de nuestros antepasados.
Los pecados
de nuestros antepasados también son puertas heredadas de maldición que nos
pueden cautivar. Los pecados que cometieron nuestros padres y que no fueron
confesados persiguen nuestras generaciones.
Éxodo 20:5,
34:7.
20:5 “No te
inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte,
celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y
cuarta generación de los que me aborrecen”
34:7 “que
guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la rebelión y el
pecado, y que de ningún modo tendrá por inocente al malvado; que visita la
iniquidad de los padres sobre los hijos y sobre los hijos de los hijos, hasta
la tercera y cuarta generación”.
6.
Por
la falta de conocimiento. Oseas 4:6.
“Mi pueblo
fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el
conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu
Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.”
7.
A
través del torrente sanguíneo, espíritus familiares o hereditarios.
Así como se puede heredar una enfermedad física, también se pueden
heredar las maldiciones y los espíritus inmundos. Ej. Hay niños que desde
pequeños reflejan un espíritu de rebeldía y de violencia que usted se pregunta
¿y de donde lo saco? Cuando analizamos al padre o a la madre veremos heredo el carácter de algunos de ellos.
8.
Por
el uso de amuletos, falsas curas o maleficios hechos por brujos y hechiceros.
Deuteronomio
7:24-25
“El
entregará sus reyes en tu mano, y tú destruirás el nombre de ellos de debajo del cielo; nadie te hará
frente hasta que los destruyas.
7:25 Las esculturas de sus dioses quemarás en
el fuego; no codiciarás plata ni oro de ellas para tomarlo para ti, para que no
tropieces en ello, pues es abominación a Jehová tu Dios;”
9.- Entrar o participar en ocultismo.
Ocultismo es
todo aquello que se hace a escondida de Dios, que esta prohibido por el, que
glorifica a otros dioses y que despierta el celo de Jehová. Veamos algunas
manifestaciones ocultistas.
· Juegos
ocultos: Calabozos y dragones, tabla Ouija, cartas del tarot o Cartomancia,
lectura de manos o Quiromancia, análisis de la escritura, lectura de velas, de
tasas de caracoles, adivinación.
· Percepción
extrasensorial.
· Hipnotismo,
astrología, horóscopos, signos zodiacales.
· Levitación,
consulta de la fortuna.
· Brujería,
magia negra y blanca, conjuros, encantamientos, hechicería, amuletos fetichismo.
· Santería e
Idolatría,
10.- Satanismo y religiones falsas:
Rosacrucismo,
Unity, gnotismo, yoga, meditación trascendental, Hare Krishna, Testigos de Jehová,
ciencia cristiana, teosofía, mormonismo, etc.
Deuteronomio
18:9-13.
“Cuando
entres a la tierra que Jehová tu Dios te da, no aprenderás a hacer según las
abominaciones de aquellas naciones. No
sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien
practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien
consulte a los muertos. Porque es
abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas
abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti. Perfecto serás delante de Jehová tu Dios.
Apocalipsis
22:15.
“Mas los
perros estarán fuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los
idólatras, y todo aquel que ama y hace mentira.”
Conclusión.
Hay Cuatro
procesos por lo que tienen que pasar todas las personas para ser victoriosos en
su vida terrenal y luego en su vida eterna:
La salvación. Que es la vivificación y la
restauración del alma al confesar a Jesús como su señor y salvador.
El bautismo en agua.
Que es el
sello de la conversión y la demostración pública de que tu viejo hombre fue
sepultado y que ha nacido una nueva creación, un hombre nuevo.
La liberación. Que es una
limpieza espiritual de todas las ataduras que quedaron en el cuerpo y el espíritu por causa del pecado y que debe
de hacerse siempre en el nombre de Jesús, porque de lo contrario seria
exorcismo, y por lo general esta viene acompañada de sanidad tanto física como
emocional.
El bautismo en el espíritu.
Que viene
siempre acompañado con la liberación. Es a través de este cuando recibimos los
dones del Espíritu Santo, para luego poder ministrar lo a los necesitados del
pueblo de Dios.
Es por esa
razón que debemos restaurar el ministerio de liberación en nuestras Iglesia,
para que la unción del Mesías sea completada a través del arrepentimiento, la
conversión, el bautismo y la liberación de las almas.
mi nombre es jhendry, soy un hijo de Dios y me siento bendecido al leer este tema de la liberacion. su importancia y nuestra necesidad de ejecutarla en el nombre de JESUS. este es mi correo, jhendryvillegas@hotmail.com soy de venezuela y quiero tener el conocimiento sobre este ministerio que nos ha sido heredado por CRISTO. quiero compartir mi testimonio y darle la gloria al UNICO digno. no quiero volver atras. quiero servir a Dios y lo hare. JEHOVA DE LOS EJERCITOS LES BENDIGA MAS
ResponderEliminarDios te bendiga grandemente Varón de Dios. Gracias por tu edifican te comentario. Te voy a enviar a tu Email una copia de mi libro Despertando el Guerrero en ti. Es un documento PDF y espero que sea de gran bendición para usted y los suyos. Dios te bendiga mas.
Eliminar