Nuestro
enemigo es netamente espiritual al igual que nuestra batalla. Nos enfrentamos
contra personas espirituales, que no tienen cuerpos físicos. El Apóstol Pablo en su carta a los Efesios, nos da una vista panorámica muy
interesante acerca de como esta constituido y organizado nuestro enemigo.
Efesios
Capítulo 6:12.
“Porque no
tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra
potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra
huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.”
Según el
Apóstol Pablo nuestra batalla no es contra un enemigo que podemos ver y parpar,
no es contra nuestro hermano, ni contra nuestro prójimo, mas bien nos
enfrentamos con seres espirituales que invaden nuestra mente y nuestros
pensamientos haciendo de ellos su campo de batalla y ejerciendo un dominio y
control de nuestras emociones y de nuestra voluntad.
Alguien
dijo: “Que quien
puede obtener el control de tu mente, puede también controlar todo tu cuerpo”
Y si estos
seres espirituales pueden cautivar nuestro corazón y no me refiero al órgano
humano que bombea la sangre al cuerpo, sino a la mente. Y si estos seres pueden
confundir tus emociones y seducir tu voluntad para que hagamos su voluntad y no
la de DIOS, ellos pueden de forma sigilosa apartarnos del propósito de
nuestro Señor para nuestras vidas. Entonces nos
enfrentamos a un enemigo sumamente dañino y peligroso.
La razón
principal por la que satanás tiene cautivado el entendimiento de
muchos hombres y hasta de muchos creyentes que están viviendo una vida mediocre
e infructuosa delante del DIOS, esto es porque han pretendido ganar la batalla
en el mundo físico y su lucha la han concentrado contra sus prójimos o sus
hermanos, usando como arma el intelecto, la sabiduría y la fuerza humana. Tenemos que considerar el siguiente principio de guerra espiritual:
“Las
batallas se deben ganar primeramente en el mundo espiritual para que su
resultado se refleje posteriormente en el mundo físico.”
El General
Douglas MacArthur de la armada de los Estados Unidos de América dijo en un momento en que
salía de una gran victoria: “Para poder ganar una batalla primero hay que conocer bien al
enemigo y el campo de batalla donde se va a pelear.”
“Tenemos
que conocer bien a nuestro enemigo.” Muchas
personas específicamente aquellos que se apoyan en la soberanía de DIOS, restan importancia y hasta critican el hecho de que en las iglesias se hable
mucho de satanás, hasta el punto que dicen que no debemos ni mencionar su
nombre y que nosotros los que pertenecemos al ministerio de liberación y de
guerra espiritual vemos demonios hasta en la sopa; pero hay una trampa del
diablo en este postulado ya que a satanás le conviene que nosotros no conozcamos sus estratagemas e ignoremos su existencia. La palabra
dice: “No ignorando sus maquinaciones” esto significa que él es como
una maquina que en todo momento esta planificando como hacernos tropezar para
caer.
Cuando un
Boxeador se va a enfrentar a su oponente pasa gran tiempo de su entrenamiento
observando cuidadosamente sus peleas anteriores con otros contrincantes, porque
de esta manera puede definir cuales son las partes fuertes y débiles de su
oponente. Así mismo como guerreros tenemos que conocer al detalle cuales son
las trampas, como es el operar del ejército derrotado de las tinieblas.
Características
del Príncipe de las tinieblas.
Satanás es:
• Astuto como la Serpiente.
• Mentiroso. Él es el padre de la
mentira.
• Engañador.
• Tentador.
• Destructor.
• Inteligente.
• Sigiloso asesino.
Su
área débil.
No es
omnipresente como nuestro DIOS, es decir no puede estar en todas partes a la
mima vez.
Sus
mayores atributos:
• Tiene un Ejército muy bien organizado.
• Es incansable. Trabaja 24 horas los 7
días de la semana.
• Nunca duerme.
Sus
metas principales:
• Entristecer a DIOS ya que no puede derrotarlo.
• Seducir a la humanidad a desobedecerle a DIOS.
• Apartar a la humanidad de su comunión
con DIOS.
• Maldecir y destruir todo lo que DIOS ha creado y bendecido.
Su
objetivo principal:
• Las almas de los seres humanos.
Su
arma principal:
• Los dardos de fuego o pensamientos que
no son llevados cautivos a la obediencia a Jesucristo.
Su
campo de batalla preferido:
• La mente de los seres humanos.
Sus
enemigos principales:
• Los creyentes y las Iglesias.
Apocalipsis
12:17.
“Entonces el
dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto
de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen
el testimonio de Jesucristo.”
La ira del dragón o satanás es contra la mujer que en este caso es la Iglesia y su guerra es contra todos aquellos que formamos parte de Ella. Todos los que queremos guardar y vivir bajo los estatutos y mandamientos de DIOS el padre y que tenemos la evidencia de Jesucristo en nuestro corazones, esos somos nosotros Tu y Yo. Esto significa que aunque tu no lo creas estas en guerra y si lo ignoras de igual manera el dragón se propuso destruir tu comunión con Dios. Preparémonos para la batalla.
Usted se preguntara, como puede un creyente y una iglesia ser campos de batallas para el diablo si ambos pertenecen a Dios, si el creyente ha sido comprado con precio de sangre y la Iglesia es la novia del Mesías? La respuestas son las siguientes:
Usted se preguntara, como puede un creyente y una iglesia ser campos de batallas para el diablo si ambos pertenecen a Dios, si el creyente ha sido comprado con precio de sangre y la Iglesia es la novia del Mesías? La respuestas son las siguientes:
- El Creyente: Hay algo en el creyente que se convierte en el botín principal que satanás quiere obtener, se llama la voluntad que es parte del alma. Si él obtiene la voluntad del creyente, también cautivará su alma y la palabra establece que "El alma que pecare esa morirá" esto implica que si pecas te separas de la comunión con DIOS y puedes perder la vida eterna. "Porque la paga del pecado es la muerte mas el regalo de Dios es la vida eterna."
- La Iglesia: Recordemos que la iglesia es un cuerpo formado por un conjunto de creyentes y ésta como cuerpo también tiene alma, emociones y voluntad. Cuando satanás obtiene la voluntad de la iglesia, ésta pierde su enfoque y queda atrapada por espíritus de errores, que mas tarde las convierten en sectas y al final terminan en doctrinas de demonios y separadas de la verdad que es JESÚS. Por lo que podemos concluir que satanás convierte al creyente y a las iglesias en su campo de batalla con la finalidad de obtener su voluntad, su libre albedrío o su poder de toma de decisión.
En uno de los temas siguientes de este seminario, analizaremos como satanás puede conseguir que el creyente y las iglesias caigan en pecado y desciendan de la gracia de DIOS.
CONTINUARA......!
A petición de muchos hermanos que nos han solicitado que publiquemos dos temas del seminario en la semana, estaremos publicando los temas los Domingos y Miércoles de cada semana.
Recuerdas que puedes comentar, participar y hacer cualquier pregunta en la columna de comentarios abajo, y que todo sea para la edificación de los lectores y para la gloria DIOS.
A petición de muchos hermanos que nos han solicitado que publiquemos dos temas del seminario en la semana, estaremos publicando los temas los Domingos y Miércoles de cada semana.
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