¿Puede Dios rechazar a algunas personas?
He escuchado a la gente decir que Dios no rechaza a nadie. Déjeme decir esto primero: Dios es un Dios de amor. Dios jamás rechazará a una persona que se arrepienta y se acerque a Dios en fe. Él dice:
“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar” (Mateo 11:28).
Dios alienta a las personas. No hace acepción de personas. No rechaza a la gente con base en su color, cultura o género. Dios es amor: “Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera” (Juan 6:37). Dios jamás rechazará a alguien que venga a Él en fe, amor y arrepentimiento. Pero eso no significa que Dios no rechace personas. Ser rechazado por Dios viene como resultado de que una persona se rehúse a recibir el conocimiento de Dios (Oseas 4:6).
A lo largo de la Biblia vemos que Dios rechaza a ciertos individuos. Adán fue la primera persona en ser rechazada. Fue echado del jardín y rechazado por Dios por su desobediencia (vea Génesis 3). La ofrenda de Caín fue rechazada por Dios, y Caín asesinó a su hermano, Abel (Génesis 4:3–10). Ismael fue rechazado por Dios (Génesis 21:8–21). Aunque Dios lo amaba y prometió también bendecir sus generaciones, aun así sufrió rechazo por Dios, todo por la impaciencia de Abraham y Sara. Abraham y Sara no podían esperar a que la promesa de Dios se cumpliera en sus vidas. Trataron de ayudar a Dios usando a la sierva de Sara, Agar, como una sustituta (vea Génesis 16:1–4). Esto causó que Ismael fuera rechazado por Dios como la simiente prometida a Abraham.
Saúl fue otro que fue rechazado por Dios. Era de la tribu más pequeña de Israel, la tribu de Benjamín, y de la familia más pequeña de esa tribu. Antes de que Dios lo rechazara, ya tenía un espíritu de autorechazo, inferioridad e inseguridad (1 Samuel 15:17 dice: “Aunque eras pequeño en tus propios ojos, ¿no has sido hecho jefe de las tribus de Israel?”). Convertirse en el primer rey de Israel provocó que estas fortalezas se manifestaran todavía más. Cuando fue ungido rey de Israel manifestó rebelión y desobediencia. Salió a la batalla una vez y decidió hacer las cosas a su manera, y de inmediato, a causa de su arrogancia, impaciencia y falta de sumisión al profeta de Dios, fue rechazado como rey de Israel.
"Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los carneros. Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos e idolatría la obstinación. Por cuanto tú desechaste la palabra de Jehová, él también te ha desechado para que no seas rey" (1 Samuel 15:22–23).
Después de este rechazo se abrió la puerta para que todo tipo de demonios oprimieran a Saúl. Comenzó a manifestar paranoia, sospecha, un espíritu asesino, hechicería y finalmente suicidio. Esta es una ilustración de cómo los demonios pueden destruir a una persona a través del rechazo.
No fue Dios quien primero rechazó a Saúl. Saúl rechazó a Dios a través de la desobediencia y determinación de ir en contra de lo que sabía que el Señor le había mandado a hacer. La vida de Saúl fue destruida por este demonio de rechazo. Lo envió en un curso de colisión. Toda su vida se fue cuesta abajo. Todo fue resultado del demonio de rechazo.
Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos (Oseas 4:6).
Esta es una maldición de rechazo. Pero hay liberación, y hay perdón. Si una persona se arrepiente y dice: “Quiero el conocimiento de Dios. Quiero buscar a Dios. Quiero conocer su Palabra”, esa persona puede ser liberada del rechazo. Pero estoy aquí para decirle que si usted rechaza la liberación, si usted rechaza el conocimiento de la Palabra, el conocimiento de lo profético, y usted dice: “No lo quiero”, Dios lo rechazará a usted. Hay algunos grupos de personas que no conocen ciertas cosas porque nunca se les han presentado. Pero a duras penas podemos decir eso en los Estados Unidos. Aquí, en alguna manera u otra, se nos ha presentado la verdad, la liberación, la sanidad, lo profético y lo apostólico. Bueno, Dios dice: “Si usted rechaza el conocimiento, yo lo rechazaré a usted”.
Cuando usted es rechazado por Dios eso abre la puerta al espíritu de rechazo. Cuando esa raíz de rechazo viene a su vida, abrirá la puerta a una hueste de otros demonios para venir que destruirán su vida. Dios dice: “Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento”.
El espíritu de destrucción es el resultado de ser rechazado por Dios. Cuando esto sucede grupos enteros de personas, familias completas pueden ser rechazadas y terminar siendo destruidas y devastadas por el enemigo. Por eso es que es tan importante arrepentirse y aceptar la verdad de Dios cuando el Espíritu de Dios está tratando con usted. No hay necesidad de arriesgarse a ser reprobados como las personas mencionadas en Romanos 1:26–32:
Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío. Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen; estando atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades; murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres, necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia; quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican.
Hoy en día existe todo un problema sobre si los homosexuales o las lesbianas se pueden casar. El hecho es que Dios lo rechaza. Dios jamás aceptará un matrimonio entre dos hombres o dos mujeres. Es rechazado por Dios. Cuando algo es rechazado por Dios, no puede ser bendecido. Siempre viene bajo una maldición.
En nuestra sociedad actual la gente está impulsando el estilo de vida homosexual y otros estilos de vida perversos tanto que muchos de ellos han cruzado le línea. Han rechazado la Palabra de Dios. Han rechazado el plan de Dios para la familia y el matrimonio hasta el punto en que están en peligro de ser rechazados por Dios. Esta es una condición peligrosa en la cual estar.
Yo le advertiría que si es parte de una comunidad que está promoviendo un estilo de vida homosexual y usted rechaza la Biblia, el cristianismo, a Dios y su diseño para el matrimonio entre un hombre y una mujer, usted rechaza la verdad y entrará en un lugar en el que termine siendo reprobado, completamente endemoniado y destruido por el enemigo.
La palabra reprobado significa indigno, echado fuera, rechazado; como basura o residuos. Esta es una persona cuya misma mente ha sido rechazada por Dios.
En Romanos 1:29–31 hay una lista de demonios que vienen como resultado de haber sido entregado a una mente reprobada. Todos son nombres de espíritus malignos que vienen a la vida de los individuos que han sido rechazados por Dios: “ injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades; murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres, necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia”. Si usted continúa en pecado y rechaza a Dios puede llegar a un punto en el que Dios lo rechace y usted sea entregado a un espíritu de destrucción.
Sé que muchos de ustedes probablemente no escuchan esto en las iglesias actualmente, pero la Biblia muestra que Dios rechazó a Caín, a Saúl e incluso a los hijos de Israel porque desobedecieron sus mandamientos. Los rechazó, los sacó de la tierra y los envió a Babilonia (vea Génesis 4:5; 1 Samuel 16:1; Oseas 1:10). Rechazó el sacerdocio de Elí, porque Elí no quería corregir a sus hijos (vea 1 Samuel 2:12–4:18). Fue rechazado y se le quitó el sacerdocio. Dios rechazó a Esaú y escogió a Jacob. Rechazó a Ismael y escogió a Isaac. Dios no acepta nada excepto lo que es digno que Él acepte. No acepta ningún tipo de sacrificio, ningún tipo de ofrenda ni ningún tipo de estilo de vida. Y existe un peligro real de ser rechazado.
Pero el rechazo de Dios o cualquier otro tipo de rechazo no es la voluntad de Dios para usted. Usted puede arrepentirse hoy, aceptar a Jesús y ser liberado de cualquier demonio o espíritu sin importar que sea lujuria, rechazo, odio, ira, amargura o resentimiento que podría estar operando en su vida. Dios lo ama y quiere salvarlo y liberarlo. Clame a Él y Él le responderá.
Y que doloroso es sentirse rechazado, yo trato de salir adelante pero mi mente no me ayuda, no sé cómo empezar
ResponderEliminarX2
EliminarSiendo sincero yo tuve mi mente reprobada afortunadamente no por mucho tiempo gracias a Dios que me hizo ver las cosas como son no es nada agradable tener una mente reprobada ya que Dios te ha entregado al pecado por tu no quieres entender yo entiendo a las personas que tienen esto por que yo pasé por lo mismo pero empieza pidiendo perdón y misericordia y que tu mente sea sellada por la sangre de Cristo y cuando te venga un pensamiento que no es de Dios di "Llevo todos mis pensamiento cautivos a la obediencia de Cristo" y te aseguro que el te va a perdonar y guiar por su camino
EliminarGracias por sus comentarios nos ayudan a seguir difundiendo la palabra de vida. Dios los continue bendiciendo.
EliminarATTE: Pastor Pablo Ramos.
Soy bautizada y eh pecado delante de DIOS 3 veces y me eh humillado delante de Dios para que tenga misericordia de mi,tengo miedo de ser señalada en la congregación dond voy no se que hacer tengo mis pastores pero además ellos tiene hj@ MUCHAS VECES me eh puesto a pensar si entre ellos se pongan a hablar de mi problema y se vaya regando en la iglesia
ResponderEliminarYo me siento asi De Reprobado por que peque haciendo lo que no convenia nunca me fui de la iglesia pero anduve con mujeres en todo mal y sigo con mi mente mal me bautice pero yo naci en la iglesiadesde muy chico fui pero bueko hice tofl lo que edta mal no de si Dios me pueda perdonar ya que estuve en toda inmundicia me siento mal solo que no se que hacer pecado sucio si el ya me limpio entonces no de que hacer nunca eh recibido el espiritu santo pero soy un hipocrita si Alguien Puede hacer ayuno y oracion por mi nadie sabe ño que hice es mas me siento tan solo por que nadie save el tamaño de mi pecado
ResponderEliminar"Si tus pecados fueren como la grana, serán como blanca lana." Solamente arrepientete, confiezalos delante de Dios, ahí en lo secreto, en tu habitación solo tú y Dios, aunque Él ya los sabe, es necesario que se los confíeces, es como una muestra de humillación, y además porque la Palabra dice " el que encubre sus pecados no prosperará, pero el que los confieza y se aparta alcanza misericordia" Es necesario confezarlos para que tengas una nueva oportunidad. Recuerda, confiezalos y apartarte, no vuelvas a lo mismo. Y ora, lee la biblia , ayuna, asiste a un iglesia donde el Espíritu Santo sea quien dirija, pide que oren por ti pero sin dejarlo de hacer tu por ti mismo, y vamos para adelante. Que Dios te bendiga.
EliminarEstoy sucio soy sepulcro emblanquesido
ResponderEliminarHola yo también me siento con la mente reprobada, contriste el Espíritu Santo cuando vino a consolarme por caer en lujuria, masturbación, pornografía y drogas. Estuve en castidad cuando me paso pero una noche los demonios me molestaban para que me masturbara y lo hice por ingenuo luego se me fue endureciendo el corazón y apague el espíritu. Pensé que ya estaba perdido e intente recuperar esa vitalidad que el espíritu santo te da pero no era posible, empece a ir a una iglesia hasta que un equipo de liberación asistió, el pastor me hacia señas para que pasara y por vergüenza no pase y cuando llegue a mi casa se me reprobó la mente, resulta que perdí el espíritu santo pero Dios me dio una segunda oportunidad dándome un don de discernimiento espiritual pero tenia que ser libre. Ahora me siento sucio y reprobado, me di cuenta de esto después de que fallaba cada proceso. El diablo es astuto y te hace desconfiar de la gente y te confunde. Si les pasa algo así no duden y vayan a un altar cristiano pidiendo liberación. Resulta que todos necesitamos romper ataduras y cadenas de pecado por que nos van acallando la conciencia sin darnos cuenta, atentando con el libre albedrio.
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